Vía El Mueble
Los espacios pequeños son todo un desafío y pueden ser un problema si no sabemos cómo decorarlos adecuadamente para sacarles todo el rendimiento al espacio y a la luz. Por supuesto que intentar meter en una casa pequeña millones de posesiones, la mayoría de las cuales son prescindibles, es algo imposible o al menos el resultado siempre será claustrofóbico y agobiante. Habitar un espacio pequeño implica ciertas limitaciones y requiere de un esfuerzo consciente. Pero a la vez se pueden conseguir ambientes con encanto, acogedores y cómodos.
La decoración puede ayudarte, y mucho, utilizando herramientas que engañan al ojo para hacerle creer al cerebro que existe más espacio del que realmente hay, mediante tres conceptos básicos: luz, movimiento y escala.
1. Proporcionar la escala
Está claro que para espacios pequeños, muebles pequeños, ¿verdad? Eso se debe a que al ver un mueble que queda encajado entre dos paredes o que no respira por arriba o por los laterales, tenemos la percepción que es demasiado grande y por lo tanto, que el espacio es pequeño para esa pieza.
Utiliza también muebles ligeros que no malgasten el espacio disponible en la estancia. Apuesta por asientos elegantes y estilizados antes que las opciones más "rechonchas" y recargadas.
2. Mantener un perfil bajo
Los muebles de perfil bajo crean una sensación de mayor amplitud por el simple hecho que dejan mucho espacio libre en la parte superior. Apuesta por camas bajas, sofás con respaldos bajos y aparadores vintage que mantienen ese estilo.
3. Patas pequeñas y muebles ligeros
La idea es crear la ilusión de más espacio gracias a la sensación de apertura y movimiento. El mobiliario aerodinámico permite que la luz y el aire fluyan no solo sobre ellos, sino también por debajo y alrededor de ellos, de modo que parecen flotar en el aire. De nuevo el estilo mid-century encaja perfectamente con esta idea, ya que son piezas bajas y con patas largas.
4. Di sí a los espejos
Si en algo estamos todos de acuerdo, es en el extraordinario poder de los espejos para crear mayor sensación de amplitud. No solo reflejan la luz, reflejan la vista, engañando al ojo, quien percibe más espacio del que realmente hay.
5. Quitar las cortinas (y las alfombras)
De nuevo, estamos hablando de engañar al ojo. Las cortinas te quitan las vistas de lo que hay más allá, incluso aunque solamente tapen parcialmente. Además, aportan volumen y cargan más la estancia. Si es posible, quítalas, mantén la ventana limpia y despejada. Pero si necesitas privacidad, opta por cortinas de tela muy ligera y que dejen pasar mucho la luz, además, colócalas en una barra más grande que la ventana, para que cuando corras las cortinas quede la ventana totalmente libre.
Con las alfombras pasa exactamente lo mismo: el suelo libre, sin texturas o colores que limiten espacios, parace fluir y crea una sensación de mayor continuidad y amplitud.
6. Blanquéalo todo
Es sabido por todo el mundo que el blanco tiene el don de reflejar la luz: amplia las estancias, consigue una sensación de espacios más frescos y ligeros, tranquilos y serenos. Pintar las paredes y el techo del mismo tono de blanco realza este efecto. Además, sirve para difuminar los límites entre la pared y el techo, haciendo que el ojo se mueva hacia arriba, consiguiendo que el techo parezca más alto.
Si crees que una estancia total white es demasiado fría, prueba a combinarla con materiales cálidos, como la madera o mezcla texturas cálidas y confortables.
7. Realza la vertical
Ya sea una estantería alta, una lámpara que cae desde el techo o algún elemento ornamental vertical. El uso de un elemento que enfatiza el espacio vertical en la habitación aumentará la sensación de apertura, además de crear mayor movimiento y flujo visual.
8. Enfatiza el horizontal
Seguimos con lo de crear movimiento. Al igual que los muebles de patas largas que crean una sensación de dinamismo, o los espejos que reflejan la luz y repiten la vista de la habitación, cualquier cosa que haga que tu ojo recorra una habitación de forma intencionada y ordenada te hará sentir mayor amplitud.
9. Despeja una zona de paso
Cuando se trata de una habitación pequeña, tenemos tendencia a colocar las piezas repartidas por la habitación para crear espacio entre ellas, pero eso al final consigue un efecto claustrofóbico y desordenado. A veces es mejor agrupar los muebles a un lado de la habitación, generando una zona de paso visible que permita que las personas fluyan sin obstáculos.
10. Usa telas livianas
Siempre que sea posible, evita materiales pesados y telas gruesas que absorben la luz y recargan la estancia. El lino es un ejemplo perfecto de un material ligero que aumentará la sensación de ligereza en la habitación.
11. Pero sobretodo, que sea simple
Los espacios reducidos agradecen el orden, eso requiere de disciplina por nuestra parte: no nos podemos permitir dejar las cosas en medio, todo debe tener su lugar y a veces debemos renunciar a todas las cosas innecesarias que vamos acumulando a lo largo de los años.
No recargar con demasiada decoración, optar por muebles sencillos de líneas limpias, huir de los patrones excesivos o de los colores abrumadores. Y mantener siempre el equilibrio son las claves que harán que cualquier estancia parezca más grande de lo que realmente es.
¿Qué te han parecido estos 11 trucos? ¿Ya aplicas alguno en tu casa? Algunas ideas son sencillas y seguramente ya las conocías, otras puede que te hayan sorprendido, pero lo más interesante es el conjunto de todas ellas y que compruebes si se cumplen todos estos puntos en esa estancia que ahora mismo te resulta tan agobiante y pequeña. Si de todas formas necesitas ayuda para dar un nuevo nivel a tu casa y conseguir que por fin sea la que has soñado, podemos ayudarte a conseguirlo. O si lo prefieres, en nuestra shop online encontrarás piezas que te ayudarán a darle un toque más Chic. ¡¡¡Feliz martes!!!
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