Antes y después de la reforma de un baño pequeño

Si hiciéramos la pregunta a todos nuestros lectores sobre qué lugar de su casa necesita una reforma urgente, seguramente el 80% nos responderíais: EL BAÑO. ¿Y porque es una estancia que nos gustaría reformar pero siempre queda en la lista de tareas pendientes? Por falta de ideas, de presupuesto pero, sobretodo, por ese miedo a las reformas: y si queda mal, y si salen mil problemas, y si el presupuesto se dispara, y si no acaban a tiempo…

Vale, sí, es una reforma delicada, por eso debemos dejarla siempre en manos de buenos profesionales, pero merece realmente la pena, por nuestro bienestar y para ahorrarnos dolores de cabeza en el futuro. Además, es una de las inversiones que ayudan a incrementar el valor de nuestra vivienda, así que siempre es un acierto.

¿Nuestro consejo? En un baño pequeño es mejor optar por colores luminosos, como el blanco, pero si no quieres que quede demasiado frío, elige blancos rotos y tonos piedra o lino, como en este baño. Los azulejos o gresite mejor si te dejan sin aliento, porque van a ser los grandes protagonistas. Elige sanitarios de tamaño proporcionado a la medida del baño, eso te ayudará a ganar espacio. Y no olvides los detalles y los toques de color, que le darán personalidad y harán que te enamores del resultado.

Fotografías vía Style by Emily Henderson

Pero no olvides lo más importante: contrata a la mejor empresa de reformas, que esté cerca de ti y que te ofrezca la mayor confianza. Olvídate del “hazlo tú mismo” o de “ya me lo hace el amigo de mi primo” o “me han dicho que ese es muy barato”: ahí es donde empiezan los problemas de verdad… Los buenos profesionales hablan claro, te resuelven las dudas y te ofrecen soluciones a cualquier problema y, por lo general, no son los más baratos, pero tampoco hace falta que elijas al más caro… Así que hazte con varios presupuestos y habla con ellos hasta que sientas que es el profesional adecuado para ti. ¡Y feliz reforma!