Este fin de semana nos hemos propuesto arreglar uno de nuestros balcones. El buen tiempo se acerca y cada vez nos apetece más disfrutar del sol y sentir que la naturaleza está más presente en casa. Seguro que la mayoría no disponemos de grandes jarines y terrazas para disfrutar del aire libre, pero podemos sacarle el máximo partido a nuestro pequeño mundo exterior teniendo en cuenta el exterior, el interior y también lo que queramos hacer en él. Por ejemplo:
1. Cuando quieres mejorar las vistas desde dentro de casa y no vas a usarlo
A veces es porque son muy pequeños o simplemente porque ese es el balcón que menos usas, pero siempre ayuda que tu ventanal te ofrezca unas bonitas vistas. Si no te gusta lo que ves o quieres enmarcarlo con verde o múltiples colores, decorar tu balcón solamente con plantas es la mejor opción. Ten en cuenta si además se va a ver al contemplar la fachada de tu edificio, una buena carta de presentación ilumina nuestra mirada.
2. Cuando quieres salir a disfrutar del exterior y tienes intimidad
Si tienes la suerte de tener árboles cerca o vecinos muy lejos, la opción de tener mobiliario para sentarte y algunos toques de color con plantas y textiles es perfecto. Desde dentro de casa vas a contemplar una extensión de tu hogar con un marco inmejorable y total libertad.
3. Cuando quieres disfrutar de tu ciudad y no te importa la intimidad
Cuando te has comprado un piso en medio de un barrio con historia y lo que más te apetece es salir y disfrutar de su ambiente, incluso que desde dentro de casa nada te tape las vistas de los preciosos edificios y parques que te rodean, la mejor opción es algo minimalista, como una pequeña mesa y dos sillas sin mucha más decoración, para que puedas tomarte una copa de vino y brindar en su honor.
4. Cuando sabes que vas a pasarte largas horas en él
Si eres adicto/a a dejar que el aire fresco te acompañe en tus lecturas o mientras tomas un vermut, ves tu serie favorita y también durante tu desayuno, comida y cena, lo tuyo son los muebles bonitos y la decoración muy cuidada. Vas a necesitar estar cómodo/a, así que añade mantas, alfombras y cojines, también tener una superficie donde poder apoyar tu libro o el portátil, y no pueden faltar plantas y una buena iluminación (guirnaldas, velas, etc.) para hacer más acogedora tu estancia allí.
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