La clave de la belleza está en el equilibrio y el diseñador danés Klavs Roselfalck lo ha sabido conseguir en la reforma de este impresionante apartamento en París del 1860. El uso de poco mobiliario, de corte simple y moderno, descarga las estancias, ya de por sí con una atmósfera densa por el adorno de paredes y techos. De esta forma, todos los elementos se realzan y se refrescan en una armonía impactante y maravillosa...
Una belleza desbordante que ha sabido controlar para no caer en el exceso, ¿qué te parece? ¿Lo ha conseguido? Si te gusta la elegancia fresca y lo clásico renovado, nuestra shop online te va a encantar ;)!!!
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