Nada en este espacio se decidió al azar: querían un espacio abierto, con diferentes rincones que ofrecieran diversas posibilidades, pero sobretodo que su equipo se entusiasmara cada día al ir a trabajar. Y es que pasan muchas horas en esas oficinas, así que nada mejor que sentirse como en casa, a la vez que reflejan la imagen y el espíritu de la marca...
Han querido mantener parte de la historia del edificio original, de 1907, dejando las paredes de ladrillo visto, donde el estilo parisino se adapta a algo más cálido y bohemio, o rompe con colores intensos y modernos. Mientras que las paredes pintadas de blanco puro se han realzado con molduras y decorado con piezas vintage en tonos blanco, rosa y dorado: nuestra parte favorita, sin duda! ¿Qué te ha parecido? Si tienes un negocio y necesitas ayuda para conseguir que sea más bonito, podemos ayudarte con la decoración o puedes encontrar tú mismo algunos tesoros en nuestra shop online! Feliz jueves!!!
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