Cuando el estilo nórdico se deja seducir por la sensualidad del estilo chic parisino, el resultado es una casa elegante que juega entre luces y sombras, en la búsqueda constante de un equilibrio entre lo frío y lo cálido, entre lo superficial y lo profundo... Y finalmente consigue su propia armonía, con un ambiente cargado de emociones y refinamiento sofisticado que nos ha cautivado.
La casa originalmente tenía unos preciosos suelos de madera en espiga y esas dos maravillosas chimeneas. Algunos diseños nórdicos icónicos, como las sillas Eames o la mesa y sillas Tulip de Knoll, reposan en ambientes cálidos gracias a paredes grises y rosas, tejidos pesados y detalles dorados, como los espejos o las lámparas. Una mezcla perfecta que esperamos te haya gustado a ti también. Si estás buscando piezas para conseguir esa charme que le falta a tu casa, pásate por nuestra shop online, o explícanos tu proyecto, y hagamos algo bonito juntos! Feliz semana!!!
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